
Antonio Ante. Familias de escasos recursos económicos sin acceso a internet, sin equipos tecnológicos, limitando su paso a la educación virtual en medio de la pandemia, es una realidad que se ha vivido en Imbabura, desde el año pasado.
En Antonio Ante, en plena pandemia, especialmente en las áreas rurales, se desnudaron estos y otro problemas. La Dirección de Desarrollo Económico y Social realizó un estudio, que estableció que de 12.000 estudiantes que tiene Antonio Ante, alrededor de 3.300 estudian en las áreas rurales, de los cuales 3 de cada 4 no tienen acceso a la tecnología, menos a la conectividad.
Para intentar reducir esa brecha tecnológica y educativa, el Municipio de Antonio Ante decidió entregar tablets en diferentes unidades educativas del cantón, en una primera fase.
El 7 de abril de 2021 se dio la penúltima entrega, en la Unidad Educativa Chaltura, en donde se entregaron 277 equipos tecnológicos, en un evento especial, que contó con la presencia de Rómulo Antun, secretario de Educación Intercultural Bilingüe, y de Verónica Silva, coordinadora zonal 1 del Ministerio de Educación, quienes aplaudieron este trabajo que permite espacios más equitativos.
En breve alocución, Antun explicó que la educación en el Ecuador es un tema que se lo debe trabajar en minga y en conjunto, por lo que a nombre del Ministerio agradeció a las autoridades municipales, especialmente al alcalde, Rolando López, porque mediante un convenio se pudo efectuar la donación de tablets.
Desde la municipalidad se resaltó que este proceso “marcará una diferencia, ya que a los padres de familia de la ruralidad, por sus escasas condiciones económicas, se les dificulta acceder a este tipo de tecnología”.
Además, dentro del evento, la primera autoridad del cantón recibió una placa de reconocimiento, donde se rinde gratitud por beneficiar a 999 estudiantes, en total, de ocho unidades educativas pertenecientes a Imbaya, Natabuela, Chaltura y San Roque.
Realidad
En su momento, López manifestó que, aunque la educación no es competencia de los gobiernos locales, es una responsabilidad social y por ello se tomó la decisión de cambiar la realidad, reducir las brechas sociales, dando acceso y oportunidad, en igualdad de derechos a las niñas, niños y adolescentes del sector rural, mediante la dotación de tablets e instalación de puntos de wifi, a fin de permitir una educación integral que el mundo actual exige, a través de un convenio de competencias concurrentes.
Convencido de que los gobiernos locales deben asumir una corresponsabilidad, el burgomaestre anunció que se asignará un presupuesto anual como una política pública en educación, para el mantenimiento de las 17 unidades educativas existentes en el cantón.
Resaltó que es necesario crear una sociedad solidaria y articulada, ya que los niños y jóvenes necesitan del apoyo de las autoridades comprometidas y con vocación de servicio.