
Antonio Ante. En un evento especial y entregando la llave de la ciudad, el Municipio de Antonio Ante hizo un reconocimiento a la comandante de la Policía Nacional, Tannya Varela Coronel.
Este reconocimiento se da por la trayectoria de Varela, que le permitió convertirse en la primera mujer en liderar la Policía Nacional.
Acompañada de la cúpula policial, la Comandante, nacida en Imbabura, recibió de manos del alcalde, Rolando López, la llave de la ciudad y una placa de reconocimiento, “galardones que simbolizan el respecto y la consideración que se ha ganado de sus autoridades y de toda la ciudadanía anteña, por sus grandes méritos y cargos, respaldando su gestión, en bien de la seguridad y orden ciudadanos”, explicaron desde la municipalidad.
Discursos
El evento especial se desarrolló el miércoles 28 de abril de 2021, en las instalaciones de la Fábrica Imbabura, donde el Alcalde, en su discurso, destacó las dignidades que la General asumió durante 36 años de servicio, hasta convertirse, el 22 de marzo de 2021, en la primera mujer en ocupar tan alta distinción en la Policía Nacional del Ecuador, estando al frente de 53.000 miembros policiales.
“Demuestra que el rol de la mujer en la vida policial está cambiando, constituyendo un claro ejemplo de que las mujeres son capaces de desempeñarse en cualquier ámbito, demostrando que hombre y mujer pueden realizar trabajos en equipo, sin distinción de género o jerarquías”, dijo López.
La autoridad municipal añadió que están convencidos que ser policía es una vocación de servicio público, comprometidos con el bien común, con los mismos principios y valores que comulgan con la corresponsabilidad de las autoridades de turno y aportar en el mismo cometido.
En este sentido, explicó sobre el desarrollo y construcción en territorio del Plan de Seguridad Ciudadana y convivencia pacífica, que se está ejecutando desde mediados de marzo.
Varela, por su parte, manifestó que constituirse como la primera Comandante General representa no solo un orgullo, sino una gran responsabilidad de legado, lucha y huellas profundas que se sembrarán en el corazón de todos los ecuatorianos.
Dijo que este compromiso convoca también a la participación activa de sus autoridades y la sociedad para poder cumplir con el mandato constitucional de servir y proteger.
Finalmente, Varela indicó que esta distinción le genera un gran encargo de lealtad con la ciudadanía, su institución y de quienes la conforman, y que la mejor manera de contribuir tal deferencia es reafirmar su gestión de velar por la defensa de los derechos humanos y de la igualdad de género, con el imperativo moral de reforzarlos y perpetuarlos, de tal modo que se extiendan en el tiempo para las futuras generaciones.