
El Puente Internacional de Rumichaca, que une las fronteras de Ecuador y Colombia, cumplirá un año de permanecer cerrado a mediados de este mes de marzo. Esta situación surgió a razón de la pandemia por el Covid-19, como una manera de reducir los contagios entre ambas naciones.
Durante su funcionamiento, por el viaducto internacional circulaban tanto automotores como peatones de ambos países y también de otros sitios, lo que representaba un dinamismo económico con las relaciones comerciales de ambos estados.
Pero, con la disposición oficial de su cierre, la situación se volcó para generar un incremento del denominado ‘contrabando’ o comercio informal, entre varios pobladores de ambas zonas. Una situación que a pesar de que sus practicantes la buscan justificar como una manera ‘alterna’ de trabajo, está penada por la ley.
Para mitigar esta situación, la Policía Nacional del Ecuador cuenta en la provincia del Carchi con un equipo especial denominado: Unidad de Contingencia Fronteriza (UCOF). De acuerdo a reportes policiales de este grupo, se desarrollaron diversos operativos en este pasado mes de febrero que dejaron avizorar resultados positivos.
Decomiso de celulares
Siendo el 12 de febrero del presente año, una unidad de transporte interprovincial estaba presta para salir de la ciudad de Tulcán. Durante una revisión en el Control Sur, sector de El Obelisco, los uniformados inspeccionaron las bodegas de dicho automotor y localizaron dos cartones.
Tras revisarlos, notaron que allí se alojaban diversos celulares de procedencia extranjera. Estos aparatos, según la policía, habrían pasado inadvertidos por controles aduaneros y tributarios y al no poder justificarlos, se los procedió a decomisar, dando un total de 60 teléfonos que representaban un costo aproximado de $ 3.600.
Repuestos y zapatos en cartones y sacos de yute
Al día siguiente (13 de febrero), mientras los controles policiales se desarrollaban en el sector del Guagua Negro (afueras de Tulcán), una unidad de transporte interprovincial circulaba por la zona y se le hizo parar su marcha para la respectiva revisión.
De acuerdo a la información policial, tras inspeccionar las bodegas del vehículo, se localizó un cartón y un saco de yute. Allí se ocultaban zapatos y accesorios de motocicleta. Una vez decomisada y contabilizada la mercadería, estos fueron los resultados:
- 17 pares de zapatos deportivos
- 15 unidades tubos de llanta de motocicleta
- 10 Tapa Bocas diferentes modelos de motocicleta
- 12 unidades pares de guantes de motocicleta
- 02 impermeables
- 06 protectores de rodillas de motocicleta
- 14 unidades disco de freno
- 04 cajas de rulimanes (10 unidades)
- 10 unidades rulimanes pequeños
- 10 unidades rulimanes medianos
- 08 unidades pastillas de freno
- 03 unidades filtros de aire
- 03 unidades rulimanes modelo Cunas
- 12 unidades de protectores de freno y embrague
- 12 unidades de cable de frenó
- 12 unidades protectores de bujías
- 03 unidades juego de cadena
- 04 paquetes retenedores
- 01 rollo manguera de gasolina
- 01 juego de retrovisores
- 01 funda de filtros de gasolinas
- 01 un rollo de cable de frenos de motocicleta
- 01 un rollo de cable de embrague de motocicleta
La totalidad de este decomiso supuso un valor de $ 2.814.
37.800 cigarrillos incautados
Cuatro días después (17 de febrero), a la altura del sector del Aeropuerto, en Tulcán, personal de la UCOF se percató de la circulación de un vehículo en una actitud sospechosa y se procedió a detener su marcha para inspeccionarlo.
Según se informó, en la cajuela de este automotor se divisaron dos sacos de yute. Luego de abrirlos se encontraron diversos paquetes de cigarrillos, aparentemente de procedencia extranjera.
El conductor al no poder justificar la tenencia de estos productos, los uniformados procedieron al respectivo decomiso y tras contabilizarlo, dio como resultado la incautación de 378 paquetes de cigarrillos, lo que representaba un total de 37.800 unidades y suponía un valor aproximado de $3.780.
Super interesante el post!!!