
Finalizado el asueto nacional por Navidad y Año Nuevo, el día de hoy en rueda de prensa, diversas autoridades de la provincia del Carchi se pronunciaron sobre los resultados obtenidos durante la vigencia del Estado de Excepción que ayer se declaró como inconstitucional.
Notorio incremento de hospitalizados por Covid-19
Oscar Ruano, gobernador del Carchi, puntualizó la situación que actualmente se presenta en el Hospital Luis G. Dávila de la ciudad de Tulcán, la cual calificó como “un punto crítico”.
Resaltó que actualmente 29 paciente con Covid-19 estarían siendo atendidos en esta casa de salud, de los cuales 15 estarían asistidos con ventiladores. Aquí agregó también la escases de medicamentos a nivel nacional.
“Hemos tenido un repunte en Esmeraldas, en Ibarra, en hospitales referenciales ellos ya se saturaron, por lo tanto nosotros estamos yéndonos en este camino”, dijo Ruano.
Trabajo policial
En lo que atañe a las labores de la Policía Nacional, Edwin Andrade, comandante de la Subzona Carchi 04, detalló las actividades cumplidas desde el 29 de diciembre hasta el 03 de enero.
Un total de ocho ciudadanos fueron detenidos por manejar en estado de embriaguez, 1.661 vehículos fueron registrados, 30 armas blancas decomisadas, 33 personas retiradas por libar en la vía pública y 31 ciudadanos sancionados por incumplir el toque de queda.
A esto se incluyó también las labores de control desarrolladas en los conocidos ‘pasos irregulares’ que llegan hasta el vecino país de Colombia, mencionando que se pudo percibir una baja cantidad de movilidad humana en estos espacios.
Operativos de control en la urbe
Mientras tanto desde la Intendencia de Policía del Carchi, Genny Tapia manifestó que se pudo notar aglomeración de personas tanto en las calles como en locales comerciales de la ciudad de Tulcán, durante el 31 de diciembre.
Sin embargo, desde las 22:00 (horario del toque de queda) ya no se logró apreciar a ciudadanos transitando por la urbe. Además, en sitios donde se realizaban reuniones familiares indicó que se realizaron los controles para verificar si no se trataban de fiestas clandestinas.
“No tuvimos clausuras en este fin de semana. Durante el 01 de enero no encontramos ciudadanos libando en las calles. Fueron muy pocos a los que se los retiraba, para lo que nosotros esperábamos encontrar”, sostuvo Tapia.