
Con los ojos puestos en una pequeña pantalla, los dedos entrelazados, las pequeñas plegarias, las alegrías y también el llanto, la familia del ciclista carchense Richard Carapaz presenció su participación en la penúltima etapa de la Vuelta a España, que se desarrolló el día de hoy.
Mientras acomodaba una pequeña tablet con un frasco de crema que servía como soporte improvisado, Antonio Carapaz (papá de Richard Carapaz) sintonizaba la carrera en una transmisión en vivo de Facebook.
Cuando logró ubicar adecuadamente la tablet para que no se cayera, se quedó de pie observando cómo transcurrían los kilómetros de la etapa ciclística. Mientras tanto Anita Montenegro (madre de Richard Carapaz) descansaba en una silleta y observaba fijamente la pantalla sin decir muchas palabras.
La exhibición de las glorias logradas
Entre las paredes de la pequeña sala donde se hallaban los papás de la ‘Locomotora del Carchi’, se dejaban ver medallas, posters, trofeos y camisetas. Todos estos objetos eran propiedad de Richi y se exhibían como en un pequeño museo.
Los minutos pasaban y más visitantes llegaban hasta la casa de la familia Carapaz ubicada en el sector de La Playa, perteneciente a la parroquia El Carmelo, a unos 20 minutos de la ciudad de Tulcán.
Las emociones estaban a flor de piel
Cuando faltaban 10 kilómetros para que finalizara la carrera, Marcela Carapaz (hermana de Richard Carapaz) llegó hasta la vivienda con otros familiares y todos se reunieron en círculo, mirando atentamente la tablet sin perder un segundo de vista la etapa.
Poco a poco las emociones fueron subiendo en intensidad y los gritos comenzaron a escucharse. Doña Anita y Marcela rápidamente tomaron la bandera del Ecuador y comenzaron a agitarla. Quizá como un augurio de buena suerte para Richard Carapaz, quien competía a miles de kilómetros de su hogar.
La pantalla marcaba tres kilómetros para que finalizara la carrera y los familiares de Richard gritaban y gritaban con emoción. Uno de ellos inclusive dejó ver en sus ojos unas cuantas lágrimas y el sollozo también se contagió entre varios de los presentes, incluidos los periodistas que cubrían el evento en el lugar.
Tras la llegada del ganador de la etapa, Marcela Carapaz y los demás contaban los segundos para mirar si su hermano alcanzaba un tiempo favorable para hacerse con la Vuelta a España, situación que no pudo lograr; pero para lo que batalló hasta el último kilómetro.
Con un sentido aplauso, todos agradecieron la participación del ‘Chiquilín’, quien se convirtió en subcampeón de este evento deportivo.
Sus padres hablaron al respecto
Tras un momento de silencio, don Antonio habló sobre la participación de su hijo, mencionando que fue “muy satisfactorio lo que hizo. Yo estuve muy emocionado. Él es el mejor de los ciclistas”.
Doña Anita, quien decidió permanecer en su asiento, recordó que antes que partiera Richard Carapaz a España le dio la bendición y pidió que Dios lo acompañara en su carrera.
Tras una breve celebración manifestó lo siguiente: “Nosotros siempre lo hemos apoyado. Nosotros estamos demasiado felices con lo que nos ha brindado. Me siento feliz y contenta y que Dios lo siga ayudando en adelante”.
Todos se felicitaban y esperaban que las alegrías vividas en aquella casa llegaran hasta España. Tras un breve momento de tertulia, los presentes comenzaron a irse dejando los recuerdos y emociones que allí pasaron.
Carapaz agiganta su leyenda
Ecuador nuevamente hizo historia en el ciclismo mundial de la mano de Richard Carapaz y con su participación en este evento deportivo, según el registro de la Unión Ciclística Internacional (UCI), se posicionó como el ciclista latinoamericano mejor ubicado en el ranking mundial de esta organización.
De esta forma, Carapaz ocupa el puesto 25 de este ranking con 780 puntos, luego le siguen los colombianos Nairo Quintana en el puesto 29, Egan Bernal en el puesto 76, Rigoberto Urán en el 91 y Esteban Chaves en el 97 de acuerdo al Top 100 de la UCI.

Fuiste el.mejor richar y siempre eres y serás el mejor de tu ciclismo y que dios siempre te bendiga a ti y a tu familia muchas bendiciones